lunes, 27 de abril de 2009






Miradas que gritan hablando.


Gritan lo que no se oye.


Lo que no se debe decir.



Palabras que callan.


Silencian lo incómodo.


Haciéndolo notar.



No existe tal paciencia.


Aquí no.


Tan sólo es esperanza.



Cuando baje la marea.


Desaparecerá con ella.




Y entonces,


las miradas dejarán de matar.


Y yo escucharé,


lo que tú no puedes decirme.



jueves, 2 de abril de 2009


...


(1, 2...)


Corre.


(...3, 4...)


Ve.


(...5, 6, 7...)


Escóndete.


(...8, 9, 10! )


Ya no quiero encontrarte.



...



Un silencio interrumpe nuestra sórdida pero banal conversación.


Lo necesitaba.


Necesitaba oír el silencio.


Me pitan los oídos cuando te acercas.


Y el estómago sube trés centímetros más.


La verguenza inunda mis mejillas.


Y las gafas, caen,


solas,


sobre el metal.


Mis manos resbalan.


Yo también.


Intento esquivarte.


Otra punzada.


Más dolor.


No quiero eso.


No se qué quiero.


Y tú?