sábado, 13 de septiembre de 2008

Hostilidad e ironía


Porqué desconfío?

Acaso tengo motivos para hacerlo?

O es que doy por hecho que se van a aprovechar de mí?

Me engañarán, me harán daño.

Es algo que siempre he tenido presente, la desconfianza crece en mí cuanto mayor es el aprecio hacia las personas, como si telas de araña se tratase, flaqueo cayendo en sus redes, como una mosca más. Eso, una mosca.

Una mosca que investiga insaciablemente pruebas de intenciones hostiles, hechos que dañen su persona.

Temo a la conversación, a la información falsa, palabras que puedan ser usadas en mi contra, promesas y alagos que haga que entre en su juego perverso.

Confundo equivocación con intencionamiento, broma con ofensa, respeto con burla y ayuda con crítica.

Guardo rencor a toda aquella persona que ha creado en mi un sentimiento de inseguridad, no olvido insultos, injurias y desprecios de los cuales creo haber sido objeto.

Siempre estoy pendiente de vuestras malas acciones, vuestros pensamientos y movimientos, respondo con ira a cualquier tipo de ultraje que percibo y consecuentemente habitúo a tener problemas con vosotros, pequeños monstruos.

Respondo con protestas directas, quejas recurrentes y distanciamientos claramente hostiles.

Puesto que siempre estoy atenta a las posibles amenazas, semejo cautelosidad aparento ser fría y no tener sentimientos de compasión.


Hostilidad e ironía.

He aquí el motivo de porqué.

4 comentarios:

sr. calavera dijo...

bueno ya que nadie comenta voy a tener que ser yo quien inaugure tu blog. pero no tengo nada que decir al respecto ;)

toma_tomate_chocolate dijo...

Elisa

Manuel dijo...

Lo de cautelosa... puede ser.
... Pero lo de fría y sin sentimientos de compasión, eso no veo como podria haber alguien que se lo creyera.

Lyenn dijo...

Oh si, conocerme da asco.